CARTA Nº 10

Querida Hannah. ¿Te has enterado de lo último de Lady Gaga? Bueno, por si aún no lo supieras, te lo cuento muy rápidamente. Pues nada, que la tía se ha pegado un buen castañazo en uno de sus últimos y estrambóticos “conciertos”. Aunque conociéndola como la conocemos, igual lo ha colado como si fuera un numerito más de los suyos, de los muchísimos que nos tiene ya habitualmente acostumbrados. Estaba haciendo equilibrios sobre unas plataformas imposibles. Y para complicar aún más el show de trapecismo, se subió a un piano en llamas y apoyó una pierna sobre las teclas y la otra sobre una banqueta. Y luego va, se resbala y tras perder el equilibrio, cae de culo quedando con la cabeza debajo del piano y las piernas hacia arriba. Pero a pesar del costalazo y de la difícil postura, la tía no soltó ni siquiera el micrófono. Se puso a gatear, como si aquello estuviera incluido en el espectáculo y en dos segundos estaba otra vez de pie. Lo puedes ver a continuación:



¿Has visto? Se ve que esta tía ya está acostumbrada y debe de haberse dado más de un porrazo en los ensayos. Hasta en la calle, porque hace unos meses “besaba” literalmente el suelo del aeropuerto de Londres. Y en aquella ocasión no le hizo falta ningún piano. Le bastaron unos absurdos zapatos.

Pues algo muy parecido le ha pasado precisamente a Murciano, hace unos días. Pero en otro aeropuerto muy distinto, jajajajaja. Pincha aquí: DESPIDOS POR AJUSTE DE CUENTAS... La verdad es que ese nombre le viene demasiado grande. Debería cambiárselo por este otro: Marciano, “El guardián de las estrellas”. Sin embargo, él no ha tenido la misma suerte que la diva del pop. Ella, al menos, sigue con sus conciertos como siempre. Pero éste, después de haberse vuelto loco con las campanas de la iglesia, se ha refugiado en una pequeñísima población (pueblechuzo, como diría él mismo) de tan solo 36 habitantes, situada en Córcega (Francia) y que se llama precisamente Piano. Pincha aquí: PIANO. Y se ha ido para practicar, no con su instrumento habitual, sino con el Piano. Fíjate si se le ha ido al pobrecito la cabeza, que me han dicho que se pasa todo el día y toda la noche, una y otra vez, hacia la izquierda y hacia la derecha, para arriba y para abajo, tocando las [88] teclas del piano (y no precisamente piano, sino más bien fortísimo) dándole miles y miles de vueltas al teclado. Pero no con las dos manos, sino con la pierna de EN MEDIO, jajajajaja.

Mira Hannah, este individuo, además de ser un cobarde por “hablar” (mejor dicho, berrear) desde el anonimato, lo es todavía más por no tener la suficiente valentía de dirigirse clara y directamente a las personas. Y tiene que recurrir a estrategias como las de dirigirse a otros para que el mensaje llegue a mí personalmente. Y eso que podría hacerlo sin ningún problema, estando “escondido” detrás de un nick. Por lo que la cobardía es todavía mayor y por partida doble. Igual que el eduvigis y algunos otros elementos que tú ya conoces. Pincha aquí: ARREGLO FLORAL EN LOS TRONOS - MARZO 2011. Que me critiquen a mí o a mi hermano Fernando no es nuevo y casi siempre lo han hecho en la misma línea de cómo lo ha hecho recientemente Marciano. Y es muy curioso que todo esto coincida con todo lo que te dije hace unos días de tu amigo Opinoke, en la carta nº 7. Por cierto, se me olvidó decirte que, además de sus famosos comentarios, hizo este otro que iba dirigido a mi otro hermano, a Juan Alfonso. Es el siguiente: “chupa cámaras la mejor defensa, atacaaaaaaa me gusta vuestra afinación.” Comentario que borró posteriormente como hizo con todos los demás, pero sin pedir luego disculpas. Puedes ver lo que le respondí en su momento pinchando aquí: LOS PEKES - ENSAYANDO PARA LA SEMANA SANTA. Pero es que además, en 2004 hice un artículo para el Boletín de la Banda de la Escuela de Música [MUSICOMANÍA] en el que ya anticipaba algunas de las cosas (por aquel entonces ya se podía notar en el ambiente) que por desgracia, al cabo de unos años, han llegado a cumplirse en mayor o menor medida. Puedes leerlo completo aquí: ACERCA DEL CERTAMEN REGIONAL DEL AÑO 2003. Y aquí tienes también un extracto del mismo, que me parece fundamental:

“...Si en alguna ocasión llegamos a participar en un Certamen o Concurso (lo que sería un triunfo ya de por sí) y encima lográramos ganar, no me gustaría pasar por la vergüenza que pasé en una de sus ediciones. Porque antes que músicos somos personas y si obtener un premio sirve para humillar a otras personas, todo el trabajo que hayáis hecho anteriormente no sirve para nada aunque lo hayáis hecho muy bien y hayáis tocado fenomenal. En este tipo de competiciones uno solo puede sentirse ganador cuando verdaderamente hay una gran diferencia entre los que ganan y los demás. Porque cuando se gana por poco siempre suelen haber especulaciones de todo tipo, que si ha habido tongo, que si el jurado está comprado... Pero cuando ganas por una victoria aplastante nadie puede tener dudas sobre el resultado. [...] Por eso en la Banda de la Escuela de Música, además de tocar bien y adquirir una cultura musical, no se puede dejar de lado otros valores como una cierta educación, el respeto a los demás, la confianza en uno mismo, la responsabilidad en lo que se hace, el esfuerzo y el sacrificio para conseguir los objetivos... y que trascienden verdaderamente a lo propiamente musical. No cabe duda de que si uno desarrolla esos valores en la Banda de Música los pondrá en práctica en cualquier otra circunstancia. Y es que la música es mucho más que tocar bien un instrumento o tocar bien una pieza musical. La vida misma es una gran partitura donde a veces tenemos que llevar la voz cantante (tocar la melodía, ya sea a solo o a varias voces); a veces hay que permanecer en un segundo plano (tocar la armonía); otras veces tenemos que dialogar (el contrapunto) y otras veces tenemos que sentar las bases para que se produzca ese diálogo (las voces graves, el ritmo). Pero antes de nada tenemos que juntarnos y ponernos de acuerdo (afinar) y luego hacer lo que cada uno le corresponde (tocar correctamente la partitura) para que todo vaya perfectamente.”


Por eso no me extrañaría que alguien ya esté pensando en hacer una película sobre Lady Gaga, en la que se incluya (cómo no) la famosa escena de la caída del piano. Al estilo de: Marciano tocando el piano, sin manos y con el ano. O Marciano (el guardián de las estrellas) tocando el piano en el planeta Urano. La verdad es que se han realizado muchísimas. Por ejemplo: EL PIANO o LA LECCIÓN DE PIANO (Jane Campion) El PIANISTA (Roman Polanski) LA PIANISTA o LA PROFESORA DE PIANO (Michael Haneke) LA LEYENDA DEL PIANISTA EN EL OCÉANO (Giuseppe Tornatore) DISPARAD SOBRE EL PIANISTA (François Truffaut) [No te confundas con el programa musical NO DISPAREN AL PIANISTA que hay en la 2, ¿de acuerdo?] También estas otras: LA MUJER SIN PIANO, LAS MANOS DEL PIANISTA, UNA ROSA SOBRE EL PIANO, EL PIANO MUDO, EL CADAVER DE LA NOVIA Y LOS PIANOS. Y quien no recuerda otros títulos donde el piano o el pianista es un elemento clave en la trama argumental: CASABLANCA, EL CANTOR DE JAZZ, EL MAESTRO DE MÚSICA, LA COMPETENCIA, SINFONÍA DE PRIMAVERA, SONATA OTOÑAL, CANCIÓN INOLVIDABLE, MELODÍA INMORTAL, SUEÑO DE AMOR, LISZTOMANÍA, COPYING BEETHOVEN, AMOR INMORTAL, RAY, SHINE, VITUS... Y un larguísimo etc.

Pero entre el piano en llamas de Lady Gaga y los comentarios apocalípticos del guardián de las estrellas, me he acordado especialmente de una película que le viene como anillo al dedo para ilustrar este tema. Se titula GRAN BOLA DE FUEGO [la canción original que lleva también el nombre de la película se llama precisamente: “Grandes bolas de fuego”] y puedes ver un breve fragmento al final de estas líneas. Espero que te guste un montón. Arrivederci, Hannah.